El Banco de Japón tiene la intención de aumentar la tasa, abandonando los valores negativos
Por primera vez desde 2007, el Banco de Japón podría aumentar la tasa de interés, finalizando la era de tasas negativas y respondiendo al aumento de la inflación y los salarios
Después de una reunión que durará dos días y concluirá el martes, el Banco de Japón, según informa Nikkei, podría tomar la decisión de aumentar la tasa de interés clave.
Este sería el primer paso de este tipo desde 2007 y finalmente pondría fin a la política de tasas negativas vigente desde febrero de 2016, informa "Interfax-Ucrania".
Actualmente, la tasa es del menos 0,1%, y el Banco de Japón sigue siendo el único banco central en el mundo que mantiene una tasa negativa. Según información de Nikkei, la tasa podría ser aumentada a un nivel de 0-0,1% anual.
El regulador está considerando la posibilidad de cambiar su política monetaria ante una inflación estable por encima del 2% y el reciente aumento significativo de los salarios en el país, acordado por las grandes corporaciones y los sindicatos.
En particular, la semana pasada Rengo, la mayor federación de sindicatos de Japón, anunció aumentos salariales del 5,28% en grandes empresas y del 4,42% en pequeñas, lo que representa el mayor aumento en los últimos 33 años.
"Shunto" – negociaciones salariales de primavera entre sindicatos y empresas, tradicionalmente sirven como un indicador del futuro aumento de los precios al consumidor.
El jefe del Banco de Japón, Kazuo Ueda, previamente señaló que los resultados de estas negociaciones serían un factor importante en la decisión sobre la tasa de interés.
Recientemente, enfatizó en el parlamento que el banco está monitoreando de cerca la dinámica del aumento de salarios e inflación, lo que podría indicar la disposición a abandonar la política de tasas negativas.
Fuentes dentro del Banco de Japón informaron a Nikkei que incluso los miembros más conservadores de la dirección están inclinados a cambiar de política ante el significativo aumento de los salarios.
Además, tras abandonar las tasas negativas, el banco central podría dejar de controlar el rendimiento de los bonos gubernamentales a diez años – un elemento clave de su política de estímulo, estableciendo el nivel máximo de rendimiento en el 1% anual.
Anteriormente, Janet Yellen expresó dudas de que las tasas de interés en EE.UU. puedan volver a los niveles observados antes de la pandemia, señalando la inflación y el aumento del rendimiento de los bonos como los principales obstáculos.